Turquía es uno de los países más interesantes para conocer en Europa por sus antiguas conexiones con el imperio griego, el persa, el romano, el bizantino y el otomano. Toda esta dinámica ha dado como consecuencia una exhibición de escenarios deslumbrantes, una cultura vibrante y una de las gastronomías más famosas en el mundo. Te mostramos qué ver en Turquía.
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Qué ver en Turquía
Este país ofrece a sus visitantes una amplia gama de cosas qué hacer. Si planeas próximamente visitar Turquía, te mostramos los lugares imprescindibles que merecen mucho la pena.
Mezquita de Santa Sofía (Aya Sofya)
La Mezquita de Santa Sofía está considerada como uno de los edificios más hermosos del mundo. Es el vestigio de la gloria del imperio bizantino y dedicarle una visita es una de las mejores cosas qué hacer en Turquía.
Esta mezquita fue mandada a levantar por el emperador bizantino Justiniano en 537 d. C. y es el mayor logro arquitectónico de este imperio. De hecho, se mantuvo como la iglesia más grande del mundo durante 1000 años.
Los delicados minaretes que la distinguen fueron agregados posteriormente tras la conquista del imperio otomano. Asimismo, el suntuoso y cavernoso interior con frescos es un gran recordatorio del poderío de la antigua Constantinopla.
Éfeso
Otro de los lugares imperdibles de Turquía son las ruinas de la antigua ciudad de Éfeso. En la antigüedad, Éfeso era una ciudad mediterránea muy importante, especialmente en la época del imperio romano. De su período de gloria ahora se conservan bastos monumentos con altísimas columnas de mármol.
La historia de la ciudad se remonta al siglo X a.C. aunque los monumentos que puedes visitar en la actualidad datan de la época del imperio romano, cuando Éfeso era un gran centro de comercio.
Algunos de los monumentos más importantes que hablan de esta época son la Biblioteca de Celsus, el complejo de casas adosadas con frescos y el Gran Teatro. Las ruinas de Éfeso se pueden explorar al detalle en un día, incluso en medio día, pero te recomendamos planificar la visita para no perderte de nada.
Capadocia
Capadocia es un valle rocoso, muy peculiar, con vistas panorámicas impresionantes y globos aéreos sobrevolando el lugar todo el tiempo. Se trata de un paisaje de rocas ondulantes y pináculos que se han formado a través del tiempo por la acción del viento y el agua.
Puedes recorrer el precioso poblado a pie, o si lo prefieres, vivir la experiencia en globo aerostático. Desde las alturas, tendrás algunas de las mejores vistas de un paisaje turco.
En este paisaje hay enclavadas entre las rocas iglesias, arquitectura excavada en cuevas de la era bizantina. Si quieres ver arte religioso, las múltiples iglesias rupestres del Museo al aire libre de Göreme y el valle de Ihlara albergan algunos de los mejores ejemplos.
Los pueblos de Capadocia suelen ser el punto de partida para explorar el campo circundante. Por tanto, este valle rocoso es una de las mayores atracciones turísticas qué ver en Turquía.
Palacio Topkapi
Este palacio en Estambul te lleva a recrear la época de los sultanes y visires. Corresponde a los siglos XV y XVI, en plena era otomana, cuando este imperio se extendía por Europa, Medio Oriente y África. El exterior es imponente, mientras que el interior es opulento.
El interior está cubierto por azulejos de fino arte, piezas de joyería invaluable y decoración lujosa en general. De este gran monumento no te puedes perder el edificio del Consejo Imperial, donde el Gran Visir dirigía los asuntos del imperio.
Otras cosas interesantes qué ver incluyen la colección de armas exhibida en el Tesoro Imperial, la colección de clase mundial de pinturas en miniatura y las deslumbrantes habitaciones Harem, diseñadas por el famoso arquitecto otomano Sinan.
Y para rematar tanto lujo y opulencia, los preciosos jardines circundantes a los que antiguamente solo tenía acceso la realeza otomana, hoy están abiertos a las visitas públicas. Deléitate con la extensa belleza de estos espacios verdes en tu visita.
Pamukkale
Uno de los paisajes más insólitos de Turquía son las terrazas de travertino blanco puro de Pamukkale, palabra que se traduce al español como “Castillo de algodón”. Justo en el medio de un paisaje verde, aparece este campo de nieve con cascadas que caen por la ladera.
Muy cerca de los travertinos están las laberínticas ruinas de la Hierápolis grecorromana, una antigua ciudad balneario por la que también puedes pasar en tu visita. En este lugar puedes explorar el antiguo teatro, los restos del ágora, el gimnasio, la necrópolis y las grandes puertas que daban acceso a la ciudad. Asimismo, todavía están abiertos los balnearios de aguas minerales que hicieron famosa a esta ciudad en el pasado.
Luego de esta visita obligada, sí puedes pasar a hacer un recorrido por la colina de travertinos y bordear los estanques de agua en las terrazas superiores. Para finalmente llegar al moderno pueblo de Pamukkale que se encuentra justo debajo.
Como recomendación final, ten en cuenta que las fotos más espectaculares de los travertinos se obtienen por la noche.
Antalya
Si estás buscando un lugar más mediterráneo, esta dinámica ciudad es lo que necesitas. Las dos playas en sus alrededores atraen a turistas de toda Europa. Mientras que dentro de la ciudad, en el casco antiguo, están las callejuelas empedradas para recorrer a pie mientras aprecias la belleza de las mansiones otomanas. Es una ciudad antigua, histórica, muy bella para explorar caminando.
El Museo de Antalya es reconocido como uno de los mejores del país, alberga una preciosa colección de estatuas de mármol helenísticas y romanas. Además en los alrededores de la ciudad hay muchas cosas qué hacer, por eso los viajeros la toman como punto de partida.
Esta es una ciudad que puedes conocer en uno o dos días. También ten en cuenta que desde aquí parten excursiones hacia las ruinas grecorromanas más famosas de Turquía, incluidas Aspendos y Perge.
Monte Nemrut
El montículo funerario en la cima del Monte Nemrut es uno de los principales reclamos en los viajes a Turquía. Se trata de un yacimiento arqueológico en el que reposan gigantescas cabezas de dioses que eran antiguamente adorados en la zona.
Dichas cabezas datan de la época de Antíoco I, gobernante del Reino de Comagene, entre los imperios romano y parto. Antíoco I mandó a construir estos monumentos y se creía tan importante que se dedicó a sí mismo un montículo funerario entre los dioses. El montículo artificial alcanza unos 50 metros de altura en la cima del monte.
Los visitantes suelen llegar aquí al amanecer para ver cómo los monumentos surgen a medida que avanza la aurora.
Oludeniz, la principal playa qué ver en Turquía
Oludeniz ofrece un paisaje impresionante que ver en Turquía, con las prístinas aguas turquesa que contrastan con los bosques vibrantes y dialogan con escarpados acantilados. Se trata nada menos que de la playa más famosa de Turquía.
Es un paisaje de postal, pero ya sabemos que cuando hablamos de una playa muy popular seguramente estará repleta en verano. No obstante, Oludeniz tiene la peculiaridad de que se puede recorrer desde el aire.
Y es que Oludeniz es uno de los destinos más populares en Turquía para surcar los cielos en parapente. Desde las vistas aéreas puedes ver no solo la costa, sino también la poderosa cima del Babadağ (Monte Baba).
Otros lugares de interés qué ver en Turquía
Aquí presentamos otros lugares interesantes qué ver en Turquía ¡No te pierdas ninguno de ellos!
- Las costas del Mediterráneo: Turquía es un excelente punto de partida para navegar por las costas del Mar Mediterráneo. Muchos turistas solo visitan el país para navegar en un desde Bodrum y Fethiye. Hay cientos de islas dispersas por esta zona, playas de arena blanca, empinadas laderas cubiertas por bosques, calas escondidas y mucho más. Una de las excursiones más famosas es el Crucero Azul, que viaja desde Fethiye hacia el sur por la costa hasta desembarcar cerca del Olimpo, donde se da el fenómeno natural de las Quimeras.
- Aspendos: El gigantesco teatro romano de Aspendos se encuentra al sur de la ciudad de Antalya, del período de gobierno de Marco Aurelio. Se considera el mejor ejemplo sobreviviente de un teatro de la época clásica aún en pie en el mundo. Podía albergar a 15.000 personas para ver un espectáculo romano. Así que es uno de los reclamos más importantes qué ver en Turquía.
- Pátara: Es una playa larguísima, se extiende por 18 km, así que ofrece mucho espacio libre de multitudes durante todo el año. Además junto a la arena se encuentran las vastas ruinas de la antigua Patara, que incluyen una calle con columnas, un bouleuterion restaurado y un teatro con capacidad para 5000 personas.
Esta ha sido una pequeña colección de lugares impresionantes qué ver en Turquía. Nos faltó sin embargo reseñar otros destinos interesantes como Pérgamo, Ani, Safranbolú, el Monasterio Sumela, las Tumbas Licias de Myra, etc. Pero esta es solo una lista de apertura, puedes sumar tantos destinos como quieras a esta guía de viaje y ampliar la experiencia. Esperamos lo hayas disfrutado, y nos vemos en un próximo viaje.
