Pocas veces hablo de mi ciudad, Valencia, una ciudad que quiero y que amo con locura ya que el blog lo dedico a trasmitir sensaciones, vivencias o acontecimientos que tienen lugar durante mis viajes y, claro, salir de mi casa a dar un paseo por mi ciudad aún no se considera viaje. Pero hoy quiero hacer un aparte y hablar de las tapas en Valencia. Hasta el 4 de noviembre hay una campaña de promoción en mi ciudad en la que un montón de bares se dedican a ofertar un quinto y una tapa, algo inaudito por estas tierras, por lo que he aprovechado para volver a visitar algunos lugares por los que hacia mucho tiempo que no pasaba.
Mi ruta de tapas por Valencia comienza desde la Plaza de la Reina. Allí, junto al Miguelete hemos quedado unos cuantos amigos para pasar un rato disfrutando de la gastronomía valenciana. Mapa en mano comenzamos nuestro recorrido por Casa de Tablas, una franquicia reciente junto a la plaza redonda, en la que nos ponen una hamburguesita de pluma ibérica con salsa. Y tanto que hamburguesita, menos mal que aún quedan unos cuantos por que como sean así me veo repitiendo la ruta. Desde aquí nos vamos a la calle de los derechos entrando primero en el Bar la Rotonda a degustar unos chipirones a la verde y luego al Bar Kiosko a probar ramana con explosión de sabores, nombre raro donde los haya pero que no es más que sepia, patatas y cebolla con salsa tartara, muy buena por cierto.
Desde aquí nos desplazamos hacia la calle Pere Comte para visitar uno de nuestros sitios preferidos cuando salimos por esta zona histórica de Valencia y que no te puedes perder por las noches. Allí se encuentra el Bar Escalones de la Lonja, un lugar sencillo, escondido en un callejón, pero con una comida sublime. Aquí hemos comido caramelos, de foie y manzana y de setas iberico, dos variedades pero que hay que probar ya que si no son las mejores, se acercan. Esta vez no probamos los calamares pero, si vais por allí en otra época, probadlos esos si que son los mejores de Valencia. El siguiente lugar lo desconocía pero me ha sorprendido por su tapita de marisco. La Tasca Sant Joan’s ha sido un agradable descubrimiento, no se si habrá tenido algo que ver las cervezas que ya llevamos encima. Una tapita sencilla pero muy sabrosa gracias al pan crujiente. Para volver.
Por último hemos bajado hacia el Mercado Central parando en el Boatella a probar las gambas fritas morunas que han hecho. Un pequeño regusto picante que le da un toque muy apreciable a la tapa. De aquí, y ya metidos de lleno en la calle San Vicente hemos decidido dar por finalizada nuestra ruta de tapas por Valencia entrando en Aire Andaluz a probar sus huevos sorpresa y vayan si nos han sorprendido. Esta si que ha sido la mejor tapa de todas. Debe ser que, ya de por si, el bar está ambientado a este tipo de comida en miniatura, que las cervezas ya no entraban igual de fácil que antes y que ya era el último pero hemos salido de allí muy contentos. Un buen broche de oro a esta pequeña ruta de tapas por Valencia que hemos llevado a cabo por el centro de la ciudad.
Hay que decir que esta ruta se limita al centro de Valencia, a la zona que rodea la Catedral, el Ayuntamiento y el Mercado Central pero que dentro de esta campaña hay dos zonas más de tapas para disfrutar en Valencia. De momento le hemos hincado el diente a las tapas que hay por aquí pero no pasa nada, hay más días y más bares por visitar que, aunque 2’50 euros por el quinto+tapa sea algo caro, vale la pena solo por recorrer las calles y monumentos que existen en Valencia.
Y recuerda que, si vienes a Valencia y te quedas con hambre o no te gustan las tapas, siempre tendrás una buena paella de verdad en la playa.