Fráncfort del Meno es una de las ciudades alemanas principales, sobre el río Meno, y un centro financiero, sede del Banco Central Europeo. En ese sentido, Frankfurt capta de inmediato en Alemania y su auge económico se ve representado en que posee los 10 rascacielos más altos del país. Pero Frankfurt no es solo rascacielos, la ciudad moderna contrasta con todo un barrio de museos. Te mostramos qué ver en Frankfurt.
Frankfurt es para Alemania una ciudad muy importante, en pasado albergó el primer parlamento democrático alemán y fue el hogar de la infancia del dramaturgo, novelista y poeta Johann Wolfgang von Goethe.
Además de rascacielos, Frankfurt tiene lugares muy divertidos, como el barrio Sachsenhausen, donde las tabernas sirven el tradicional Apfelwein y la vida noctura siempre propone nuevas aventuras. Te mostramos qué ver en Frankfurt a continuación.
Qué ver en Frankfurt
Hemos seleccionado algunos de los rascacielos y monumentos imprescindibles para ver en tres días. Apúntatelos y no dejes de visitarlos.
Museumsufer
Museumsufer (Museum Embankment) es un conjunto de 38 museos agrupados a ambos lados del río Meno, la mayoría en la margen izquierda (lado sur). Por nombrar algunos, hay museos de cine, etnografía, arquitectura, arte, etc. Puedes ver más información sobre los horarios y los museos aquí.
Si viajas a Frankfurt en dos días, puede que no tengas tiempo para entrar a cada uno de los museos, pero si recomendamos hacer el recorrido por Museumsufer, ya que es un lugar imprescindible de la ciudad.
La idea de Museumsufer se desarrolló entre en la década de 1980 a 1990. Algunos museos fueron instalados en casas patricias, mientras que otros fueron instalados en lugares especialmente diseñados por arquitectos eminentes como OM Ungers y Richard Meier.
Main Tower

Frankfurt tiene todo un complejo de rascacielos que está en crecimiento, sin embargo, solo hay uno con una plataforma de observación pública y es el Main Tower. Se trata de una torre de 200 metros de longitud que se inauguró en el año 2000 y es el cuarto edificio más alto de la ciudad y también el cuarto más alto de todo el país.
Esta torre fue diseñada por Schweger und Meyer, y llaman la atención en el vestíbulo dos piezas de arte moderno: una instalación de video de Bill Viola y un mosaico en la pared de Stephan Huber.
Se encuentra justo del lado este del Bankenviertel, así que ofrece una vista limpia desde la parte superior sobre el Altstadt y el Meno.
Los viernes y sábados, la plataforma de observación está abierta un poco más tarde (hasta las 21:00 en invierno y las 23:00 en verano), así que es un plan perfecto para ver las luces de Frankfurt por la noche.
Plaza Römerberg

La Plaza Römerberg es el corazón del centro histórico de Frankfurt. Es una plaza abierta muy bonita rodeada de algunos de los edificios más tradicionales que datan de los siglos XV y XVI, con el típico entramado de madera y fachadas de colores.
Alrededor de esta plaza se encuentran monumentos y edificios importantes como el Ayuntamiento, la Iglesia Sant Pablo, la Antigua Iglesia de San Nicolás y la Fuente de la Justicia de 1543, que se encuentra justo en el medio.
Vale la pena mencionar que estos no son los edificios originales, sino fieles reconstrucciones, pues todos fueron destruidos bajo los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
Antes habíamos mencionado que Frankfurt tenía gran importancia histórica en la política de Alemania, pues aquí se instaló el primer parlamento democrático. Retomamos esta idea para indicar que precisamente la Iglesia Sant Pablo era la sede de este primer parlamento en 1848.
Una buena forma de conocer Frankfurt es recorrer todo su casco antiguo y este es el epicentro del mismo.
Catedral de Fráncfort

La Catedral de Fráncfort tuvo una gran relevancia durante la unificación de Alemania en el siglo XIX, por su importancia histórica en los días del Sacro Imperio Romano Germánico. Esta catedral de estilo gótico se terminó de construir en el siglo XV, y ha sido fielmente reconstruida dos veces: una después de un incendio en 1867 y otra en la década de 1950 después de la guerra.
Anteriormente era una colegiata (llamada Colegiata de San Bartolomé) y no recibió el título de catedral hasta 1562. En ese entonces, comenzó a albergar las ceremonias de coronación de los Reyes del Sacro Imperio Romano Germánico. En total, fue el lugar de coronación de 10 reyes entre 1562 y 1792.
Asimismo, la Catedral de Fráncfort era antes de esto la sede de las elecciones imperiales desde 1356. Todavía conserva mucho del mobiliario y los objetos que formaban parte de las ceremonias de coronación, así que si te gusta la pompa de los eventos monárquicos, seguro te encantará esta catedral.
Para hacer una visita a la Catedral de Fráncfort, la encontrarás abierta al público de jueves y sábados de 9h a 12h y de 14:30h a 18h; viernes y domingos de 14:30h a 18h.
Jardín de Palmeras
Este jardín botánico inaugurado en 1871 se extiende por 22 hectáreas y exhibe especies de plantas y flores de todas partes del mundo, en invernaderos o al aire libre. Los ejemplares están categorizados por regiones; por ejemplo hay un pabellón de vidrio que contiene un paisaje subártico. También contiene un tropicarium para la selva tropical, así como dos estructuras separadas para el ambiente desértico.
Hay plantas que se han mantenido en este entorno por más de un siglo. Asimismo, hay mucho más que plantas por ver en este lugar, también hay exposiciones y actuaciones en el histórico Festsaal, y el Jazz im Palmengarten es un festival de jazz que tiene lugar al aire libre. Se remonta a 1959 y se considera el festival de su tipo más antiguo.
El Jardín de Palmeras está abierto todos los días de 9h a 6h de febrero a octubre. Los demás meses del año cierra dos horas antes.
Barrio Sachsenhausen
Cruzando el Puente de Hierro o Eiserner Steg se llega del centro histórico de Frankfurt al barrio nuevo (Sachsenhausen). Durante cientos de años, Sachsenhausen fue un pueblo distinto al resto de Frankfurt, aunque también estaba protegido por el anillo de la muralla de la ciudad.
Antiguamente, esta margen izquierda se dedicó a la agricultura. Pero llegó una época en la que el clima comenzó a hacerse más fresco, por lo que se reemplazaron las viñas por los huertos de manzanos (siglo XVIII). Y entonces Sachsenhausen comenzó a llenarse de bares de sidra (Aplfelwein).
Por tanto, una de las actividades obligadas qué hacer en Frankfurt es cruzar el Eisener Steg para dar un paseo por las calles empedradas tradicionales de Sachsenhausen y por supuesto tomarse algo.
Entre las calles en las que se encuentran estas tabernas y donde podrás degustar comida local están Rittergasse, Paradiesgasse, Klappergasse, Textorstrasse, Brückenstrasse y Schweizer Strasse. En esta última, están Apfelwein Wagner y Zum gemalten Haus, dos de los locales más antiguos.
Bolsa de Frankfurt
El edificio de la Bolsa de Frankfurt es imponente y con estilo neoclásico, un digno centro de finanzas en el que se mueven miles de millones de euros al día. De hecho es uno de los centros bursátiles más importantes en todo el mundo. Pero no solo esto lo hace interesante, en verdad es una edificación impresionante y en la zona también hay otras joyas de la arquitectura. Por mencionar algunos:
- El Alte Oper (Antigua Ópera) de estilo renacentista.
- La Eschenhaimen Turm, una antigua puerta medieval de la ciudad que no fue destruida durante los bombardeos.
- El impresionante Centro Comercial MyZeil ubicado en la calle comercial Zeil.
- El cubierto Kleinmarkthalle.
Torre de Eschenheim, el monumento original qué ver en Frankfurt

El Eschenheim Turm es lo poco que sobrevive de la muralla medieval de Fráncfort en pleno siglo XXI. La mayor parte de la muralla se derribó a principios del siglo XIX, cuando se modernizaron las defensas. Pensaban derribar también esta torre de 10 pisos, pero finalmente se convirtió en monumento, en contra de los deseos del Conde d’Hédouville, embajador de las fuerzas de ocupación francesas.
Esta torre corresponde al siglo XV y es el monumento más antiguo que se conserva sin cambios en Frankfurt. Su diseño es el original de Madern Gerthener, quien también trabajó en la catedral.
Esta estructura defensiva sobrevivió también a los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. Así que vale la pena desviarse un poco e ir a verlo, pues no es una reconstrucción como la mayoría de los monumentos qué ver en Frankfurt.
Otros lugares qué ver en Frankfurt
Aquí sumamos más lugares si vas con buen tiempo. Son también maravillosos y harán que tu experiencia en Frankfurt sea mucho más interesante.
- Cementerio judío: El cementerio judío es uno de los lugares más interesantes qué visitar en Frankfurt porque conmemora a las víctimas del Holocausto. Este cementerio está rodeado por un muro con más de 11.000 placas con los nombres de los judíos de Frankfurt muertos en los campos de concentración.
- Casa de Goethe: La casa del novelista y dramaturgo alemán, autor del “Fausto”, es uno de los puntos de atracción más visitados en Frankfurt. Esta vivienda fue destruida durante los bombardeos en la Segunda Guerra Mundial, pero fue restaurada y se recuperaron numerosos objetos originales, retratos de la familia, pinturas y el escritorio donde Goethe. Está abierta al público e lunes a sábado de 10h a 18h y domingos de 10h a 17:30h.
- Puente de Hierro: El Eiserner Steg es el puente que atraviesa el río Meno y conecta el centro de la ciudad y el área de Sachsenhausen. Tiene más de 150 años de antigüedad, aunque ha sido reconstruido dos veces, una en 1912 cuando el Meno se hizo navegable a barcos más grandes, y la otra tras los bombardeos en los últimos días de la Segunda Guerra Mundial.
- Mainkai: Pasear a las orillas del Meno es una de las cosas más divertidas qué hacer en Frankfurt sobre todo porque a ambos lados hay una franja de zonas verdes con césped, parterres de flores y árboles trasmochos. En verano, este es un lugar muy alegre donde las familias se reúnen a hacer picnic y en las noches los amigos toman una cerveza.
- Liebieghaus: Es una suntuosa villa que data del siglo XIX y que alberga un museo de esculturas. Antiguamente era una residencia de ancianos que mandó a construir el magnate textil Baron Von Libieg en 1890. Actualmente su colección ofrece una visión general de más de 5000 años de escultura con exhibiciones desde el Antiguo Egipto, Grecia y Roma, hasta los estilos románico, gótico, renacentista, barroco y neoclásico.
Más lugares qué ver en Frankfurt
Frankfurt es una ciudad que merece mucho la pena, por lo que dos o tres días se quedan cortos. No obstante, si el tiempo te ha rendido lo suficiente, los siguientes monumentos, museos, atracciones y puntos de interés pueden tener un espacio en tu itinerario de viaje:
- Iglesia de San Pablo.
- Museo de Historia Natural Senckenberg.
- Grüneburgpark, uno de los lugares favoritos en la ciudad para relajarse y pasar el rato.
- Museo Angewandte Kunst.
- Klassikstadt, para los amantes de los coches clásicos de Porches, BMW, Jaguar, Mercedes, Aston Martin, McLaren y Lamborghini.
Qué comer en Frankfurt
En Frankfurt se pueden degustar muchas delicias alemanas como salchichas y quesos, pero lo que no puedes dejar de probar es la Salsa Verde (Grüne Soße), hecha de siete hierbas frescas: Perejil, borraja, perifollo, cebollino, pimpinela, berro y acedera. También el Apfelwein (Ebelwoi), una especie de sidra tradicional que se ha preparado en Frankfurt por más de 250 años.
Finalmente, para degustar estos elementos de la gastronomía de Frankfurt y muchos otros más te recomendamos visitar el Kleinmarkthalle, un mercado tradicional que ofrece productos frescos y lo mejor de la gastronomía nacional e internacional.
Esperamos que nuestra guía de viaje con lugares qué ver en Frankfurt sea de gran ayuda para encontrar sitios de interés. Todavía nos han faltado algunos otros, pero esta selección inicial puede ser esclarecedora en un primer viaje a Frankfurt. Sin más, solo nos queda desearte una feliz experiencia en Alemania.