Ir a Pamplona es ir a una de las ciudades en las que los pintxos mandan en la cocina. No es lo único bueno que tiene la cocina navarra pero la tradición de salir de pintxos con los amigos hace que la vida alrededor del centro sea un bullicio constante. Es espectacular recorrer las calles de la parte vieja a la hora de la comida o la cena viendo como sus bares «luchan» por atraer a los clientes a base de ofrecerte unos pintxos muy elaborados y jugosos.
Los bares de los que te voy a hablar a continuación puede que no sean los mejores, ni siquiera los más conocidos. No son los más antiguos o tradicionales, ni tampoco aquellos más buscados por los turistas pero de lo que si que forman parte es de mi ruta, ruta de pintxos por Pamplona que comparto contigo desde este blog para que disfrutes de ellos de la misma forma que yo lo hago cada vez que acudo a esta preciosa y sorprendente ciudad que es Pamplona.
Comienza tu ruta por el Bistrot Catedral, bar situado enfrente de la catedral de Pamplona y que destaca por que puedes pedir una maravillosa y completa tabla de quesos mientras disfrutas del sol, los días que sea posible, en su terraza con unas vistas privilegiadas de la catedral. Desde aquí continua tu ruta hacia la izquierda bajando por Navarrería para llegar hasta La Mejillonera de la que no te puedes ir sin degustar alguna de sus maravillosas tortillas. Son enormes y tienes multitud para elegir. Una recomendación: prueba la de patatas y queso, sencillamente genial. Una vez salgas de aquí cruza hasta el Cordovilla y pide un pintxo de frito de pimiento, no te defraudará. Con estos tres sitios ya habrás disfrutado de la zona de Navarreria.
Después de estar en esta zona dirígete hacia la zona del encierro, bajando hacia Mercaderes, y llega hasta la Estafeta, la calle más famosa de toda Pamplona, en la que está el Bar Cafeteria la Estafeta, un coqueto local que suele tener barriles en la calle para sentarse en ellos mientras se disfruta de un pincho de bacalao con pimientos que esta de vicio. Continua tu ruta subiendo hasta el final de la Estafeta. Allí, al girar por una callecita estrecha hacia la Plaza del Castillo, te encuentras con el Gaucho, pinchos muy elaborados y modernos en un sitio muy animado en el que comer pinchos es un arte. Pide unos huevos con txangurro y dejate llevar.
Desde aquí debes seguir hasta la calle San Nicolás situada a la izquierda de la Plaza del Castillo. Allí puedes degustar una maravillosa viera rellena de su propia carne y bechamel en el Bar San Nicolás o entrar a degustar algunos de los excelentes y conocidísimos pinchos que salen de la cocina del Baserri uno de los históricos locales de Pamplona y que es punto de visita obligado en cualquier ruta de pinchos. Degusta un pintxo de bacalao ahumado para finalizar con esta pequeña ruta del pintxo por Pamplona que te propongo. Con estos dos bares ya habrás disfrutado de esta otra zona a la que te recomiendo que vuelvas por la noche.
Hay muchos más, hay muchos mejores, hay muchos por visitar y descubrir pero estos son los que yo siempre visito cuando tengo la suerte de poder escaparme a Pamplona. Y es que ir de pintxos en Pamplona es un arte y estos siete bares son un claro ejemplo. Disfrutalos y ya me cuentas.